Un antiguo alumno de la UDIMA, ganador de los VII Premios a la Excelencia de la Cátedra Mutualidad de la Abogacía

Mié, 23/10/2019

Imagen cedida por el antiguo alumno.

UDIMA Media

Jaime Sardina, antiguo alumno de la Universidad a Distancia de MadridUDIMA, ha sido elegido como el ganador ex aequo de los VII Premios a la Excelencia de la Cátedra Mutualidad de la Abogacía. Un reconocimiento anual que premia la elaboración de trabajos originales y novedosos sobre la práctica de la abogacía, su evolución y la influencia de otras disciplinas. Ha obtenido el primer premio por su trabajo: 'La disrupción en el modelo de negocio de la abogacía: perspectivas y oportunidades para los jóvenes abogados'.

Sardina, alumno del Máster Universitario en Práctica de la Abogacía de UDIMA durante el curso 2018 -2019, pretendía abordar un asunto de "gran interés" para el colectivo más joven de su profesión. "Con toda la carrera profesional que tenemos por delante, las variaciones y disrupciones que se produzcan en la práctica profesional de la abogacía nos afectarán de lleno. Y cuanto más familiarizados, preparados y dispuestos estemos a mejorar el ejercicio profesional y ser más eficientes, mejor será nuestro desempeño", admite el estudiante.

El premio está dotado con: 10.000 euros, dos años de cuotas en el Plan Universal de la Mutualidad de la Abogacía, el reembolso del alta en el Colegio de Abogados del premiado y el pago de dichas cuotas durante los dos primeros años de colegiación. Un "espaldarazo" para Sardina, que asegura estar "muy agradecido" y "motivado para seguir aprendiendo y adentrándome en las nuevas formas de ejercer la abogacía".

No obstante, aunque no hubiese ganado, confiesa que haber leído y estudiado sobre el tema igualmente le habría "ayudado mucho". "Era una materia sobre la que quería profundizar y conocer un poco más", cuenta el alumno. En su opinión, la innovación es un asunto que, más allá de tratarse en los centros educativos, es tarea de los profesionales. "Hablar de innovación (...) es responsabilidad de los despachos y, sobre todo, de la inquietud e interés de los propios abogados en aprender por sí mismos, pensar y proponer nuevas formas de trabajar que mejoren la eficiencia y calidad del ejercicio profesional", ha valorado.

En esa línea se postula de cara al futuro. El trabajo ha sido un estudio sobre la disrupción en el modelo de negocio de la abogacía, explica a UDIMA Media. "Ahora queda la segunda parte del partido: implementar y aplicar esa inquietud en mi ejercicio profesional".