Este curso de formación avanzada ofrece un recorrido integral por los conceptos fundamentales que articulan el impacto del trauma psicológico desde una perspectiva del desarrollo, con especial énfasis en el apego temprano y la disociación. A través de una mirada actualizada basada en la evidencia empírica y neurocientífica, los participantes explorarán los principales modelos explicativos del trauma, comprendiendo sus efectos a nivel emocional, cognitivo, relacional y corporal. El enfoque integrador del curso permite conectar la teoría con la práctica clínica, proporcionando herramientas aplicables en contextos terapéuticos reales.

Uno de los ejes centrales del programa es el análisis del apego como organizador de la experiencia emocional desde la infancia. Se abordará también cómo las experiencias traumáticas —especialmente aquellas vividas durante la infancia y la adolescencia, como el abuso, la negligencia o la exposición a violencia— pueden dejar huellas profundas en el desarrollo psicológico, con manifestaciones que van desde trastornos internalizantes hasta alteraciones graves en la identidad y la regulación emocional.

Asimismo, el curso profundiza en la disociación como fenómeno clínico complejo que puede manifestarse a lo largo de la vida, desde síntomas sutiles hasta trastornos disociativos. Los participantes aprenderán a identificar estos patrones, diferenciarlos de otros cuadros clínicos y comprender su funcionalidad dentro de un sistema defensivo frente a contextos de apego traumático. Esta formación se convierte así en una oportunidad única para profesionales que deseen fortalecer sus competencias clínicas en el abordaje del trauma complejo desde una perspectiva sensible, integradora y fundamentada.