Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".
Una víctima, múltiples agresores. Un escenario que ha ido cobrando cada vez mayor atención mediática y que parece haber aumentado en nuestro país. Pero ¿es realmente así? ¿Qué datos tenemos sobre la frecuencia o el perfil de los agresores? ¿Y las víctimas? La investigación sobre violencia sexual ha crecido en los últimos años, pero no ha sido hasta hace poco que se ha elaborado el primer informe sobre violencia sexual ejercida en grupo en España. Uno de sus autores es el profesor Jorge Santos Hermoso del Grupo CEF.- UDIMA, que ha colaborado con investigadores del Ministerio del Interior para elaborarlo.
Redacción CEF.- UDIMA
El informe Violencia sexual ejercida en grupo. Análisis epidemiológico y aspectos criminológicos en España es el resultado de un proyecto de investigación de más de cuatro años, en el que el doctor Santos Hermoso, profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas de UDIMA, ha colaborado estrechamente con el Área de prevención y estudios de Violencia de Género y Sexual y con la Oficina Nacional Contra las Violencias Sexuales (ONVIOS) del Ministerio del Interior.
El estudio analiza un tema "relevante pero poco abordado por la literatura científica", reconocen sus autores. Aunque hay varias investigaciones de hace varias décadas sobre violencia sexual, los trabajos "siguen siendo escasos", dicen, y la mayoría compara este tipo de violencia con los casos de un sólo agresor. Un enfoque que "limita la capacidad de profundizar en las características distintivas de los casos con varios autores", comentan los investigadores.
Ahora, gracias al estudio, conocemos más detalles de cómo son las agresiones sexuales cometidas por al menos dos personas. Los investigadores han analizado por primera vez las características epidemiológicas y criminológicas de este tipo de sucesos en España. Para ello han contado con la colaboración de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra.
Más allá de los informes que hasta ahora publicaba Interior sobre violencia sexual (destinando un apartado a la prevalencia de los casos con varios autores,) el informe en el que ha participado el doctor Santos Hermoso permite conocer cómo se producen y qué características tienen las víctimas y los autores.
Según el estudio, el 32,8% de las víctimas de agresiones sexuales en grupo eran menores en el momento de los hechos, con una edad media de 23,4 años. Mientras, los agresores que atacan en grupo y son menores de edad suponen el 22,8% de los casos; de media tienen 23,8 años.
Los investigadores resaltan cómo la edad de los agresores está relacionada tanto con el número de autores implicados como con la violencia ejercida. A medida que aumenta el tamaño del grupo, "disminuye la edad de los autores". Y en los casos con más violencia, los autores son "también más jóvenes".
El escenario "más común" que han encontrado es una agresión con dos atacantes (60,9%) y una víctima (93,9%), por lo que es "poco probable" que haya más de una víctima. "Se ha encontrado un caso con hasta 15 autores", comentan, pero la probabilidad de que se registren "más de cuatro autores es baja".
El estudio analiza también otro elemento relevante: el contexto en el que se producen estas agresiones grupales. Muchas suceden en el exterior, afirman, "aunque lo más interesante tiene que ver con el momento". Como detallan en el informe, es "muy común que estos casos se den en fin de semana" (entre el viernes y el domingo). Además, llaman la atención sobre el consumo de drogas: "En muchos casos, víctima o autor habían consumido algún tipo de sustancia".
La vulnerabilidad de las víctimas se ve, pues, reflejada en su edad y en el número de autores. Un aspecto reseñable porque, incluso siendo casos con varios autores (lo que "sería suficiente para vencer la resistencia de la víctima"), perciben que cuantos más hay, más violentos son.
Por ello su hipótesis es que, en estos casos con varios agresores, la violencia "no persigue un objetivo instrumental". Es decir, no son más violentos para "vencer la resistencia de la víctima", sino que podría ser "un fin en sí misma".
Pese a la percepción que pueda haber con relación a la prevalencia de este tipo de violencia
sexual, la realidad es que "no se ha registrado un aumento estadísticamente significativo de
este tipo de casos". Los informes de Interior muestran que la violencia sexual ejercida en grupo viene suponiendo entre un 4.3% y un 4.8% de toda la delincuencia sexual registrada en España.
"Si bien es cierto que en cifras absolutas los casos han aumentado, al haberse registrado un aumento de la delincuencia sexual en general, el porcentaje no ha variado", subrayan los autores.
Y es que, como explican los investigadores, en las agresiones sexuales hay que distinguir claramente entre los casos que se cometen y los que se conocen (denuncias). "No podemos olvidar que la violencia sexual es una de las tipologías delictivas que mayor número de casos no denunciados presenta (cifra oculta)".
Con el paso de los años se ha visto cómo hay cada vez más delitos sexuales, pero argumentan que esto podría explicarse precisamente porque hay más casos conocidos, y no porque hayan aumentado realmente. Pese a esto, insisten en que "hay que seguir trabajando para que las víctimas de este tipo de delitos denuncien los hechos".
"Este informe es un primer paso en el estudio de un fenómeno muy concreto, que tiene unas características distintivas y que registra un perfil de víctimas muy vulnerables. Para desarrollar estrategias de prevención eficaces hay que profundizar cada vez más y plantear investigaciones cada vez más especializadas. Solo así se podrá individualizar la protección de las víctimas".